Doña Inés es una pedanía de Lorca con vestigios que datan desde aproximadamente el 120.000-95.000 a.C., encontrados en las terrazas del río Turrilla. A lo largo de la historia, la región ha sido habitada por neandertales, íberos y romanos, quienes establecieron asentamientos y villas agrícolas en la zona. Durante la Edad Media, el territorio fue donado al Concejo de Lorca por Alfonso X y posteriormente vendido al marqués de Villena. En el siglo XVIII, la comarca fue dividida en diferentes señoríos, siendo el de Don Gonzalo Musso en La Paca el más relevante para la pedanía de Doña Inés.
En Doña Inés, podemos encontrar la Fuente de Los Cantos y el área detrás del Molino como excelentes lugares para contemplar el atardecer. La Villa Romana de Los Cantos, la Ermita de San Isidro y el Homenaje al agricultor incansable en el centro del pueblo son otros puntos de interés cultural y arquitectónico. Además, es posible visitar talleres artesanales para conocer más sobre la artesanía local.
La pedanía de Doña Inés también es conocida por sus fiestas patronales en honor a San Isidro, que tienen lugar el fin de semana más próximo al 15 de mayo. Durante estas festividades, los visitantes pueden disfrutar de actividades como la cucaña, la verbena popular, la procesión de San Isidro y la Virgen del Rosario, así como las actuaciones de cuadrillas y degustaciones de la gastronomía típica.
Una de sus festividades más idiosincrásicas es la Noche de la Pava, la Vela y el Candil, durante la que los vecinos apagan toda luz eléctrica en el pueblo, pasando la noche con velas y lumbres. Se festeja con música y bailes y se exponen aperos tradicionales.
Doña Inés se encuentra a 34 kilómetros de Lorca y se puede acceder a través de la carretera de Caravaca. Una vez que se atraviesa la diputación de La Paca, se toma el desvío a la derecha en dirección a Cehegín y, después de unos 4 kilómetros, se toma el desvío a la izquierda hacia Doña Inés.
Rutas por la zona
